“Todos cuentan que ella es mala…”, cantaba César Costa en los 60s. Esa canción me recuerda cuando mi padre la tarareaba y cuando el showman y gran nuevaolero Billy Jordan la cantó a mi pedido cuando celebró en el Sachun un aniversario más de vida artística.
Amada por la misma prensa que hoy la crítica, la Congresista Mercedes Araoz no es mala y tiene corazón, contra lo que dice la letra de esa canción.
La conozco desde hace casi 40 años. En aquellos años era, y sigue siendo, una inteligente y guapa mujer , alegre y dedicada a los estudios.
De su promoción de la Universidad fue la que más alto ha llegado como personaje público. Ministra de Comercio Exterior y Turismo, Ministra de Economía, Primera Ministra, Congresista y Vicepresidenta del Perú. ¿Llegará a ser la Primera Mujer que asuma la Presidencia del Perú?
Quizás. Nada está dicho y en medio de tanta incapacidad comprobada, le tocaría asumir el cargo tal como manda la Constitución. El actual inquilino de Palacio de Gobierno ya dijo que no puede y no quiere seguir “gobernando”. Lamentablemente el cargo le quedó ancho y como plantea la Congresista, Paloma Noceda, diera la impresión que le estuviera “haciendo la camita” a un radical antipatria.
Araoz Fernández tiene experiencia en el manejo de la cosa pública y se ha sabido conducir con cierta medianía en el mar encrespado de la política. Claro está que deberá consensuar una agenda mínima que saque al Perú del marasmo, del odio incendiario y asuma las causas del Perú de cara al Bicentenario.